Y ya van tres. El primer campamento fue fácil de organizar, el segundo año fue difícil porque hubo que hacer muchas gestiones para buscar un sitio ajustado a nuestro presupuesto y este tercer año también ha sido difícil por los pocos niños/as que querían venir. Pero, pensando en el beneficio personal de cada alumno/a, y puesto que había un número mínimo asequible, decidimos a principios de junio volver a organizar un campamento, en esta ocasión con la empresa "Alúa.es". Los participantes han sido Alejandro Moreno, Elena, Inés, María Moreno, Ismael, Darío, José Antonio, Adriana, Celia, Laura, Arantxa, Héctor, la seño Maribel y el maestro Miguel Ángel.

Salimos el pasado sábado de mañana hacia las instalaciones de la empresa en Iznájar. Tras dos días allí, esta mañana hemos hacia el centro que Alúa tiene en Benamejí para terminar las actividades previstas. Juego de orientación, kayac, big sup (tabla de paddel surf gigante), actividades nocturnas, pista americana, paintball, rafting y circuito de puentes arbóreos son las actividades más reseñables que hemos realizado. 

Descatamos varias cosas de estos días. La primera, como siempre, la cantidad de valores que los campamentos ofrecen a asistentes: esfuerzo, reciedumbre, autonomía, convivencia, amistad... La segunda, el comportamiento de nuestros alumnos/as durante los tres días: realmente ejemplar y prácticamente perfecto, tal y como nos decían nuestros monitores. Y la tercera, no menos importante, la categoría de Marta y Mario, los monitores de Alúa que han estado con nosotros las 24 horas acogiendo nuestras preferencias siempre que podían. ¡Muchísimas gracias, chicos! Ha sido un placer haberos encontrado. Además, también queremos desde aquí dar las gracias al resto del personal de la empresa Alúa por habernos tratado con tanto cariño.

El año que viene, sin duda, más. El camino de ilusión que trazan nuestros alumnos/as también está marcado por esta preciosa e característica actividad.